Descubrió su vocación cuando comprendió que la informática no solo era lógica y código, sino una herramienta poderosa para ayudar a los demás. Alicia Gómez Pascual, estudiante de Ingeniería Informática, ha sido reconocida por su trayectoria con el premio a la mejor alumna universitaria en los STEM Talent Girl Awards 2024. En esta entrevista comparte cómo un primer chispazo de curiosidad se convirtió en pasión, habla de su investigación con inteligencia artificial, del papel clave que han jugado sus mentoras, y del reto de enfrentarse a estereotipos siendo joven y mujer en tecnología. Una conversación inspiradora sobre cómo abrirse camino sin dejar de ser una misma y por qué el futuro necesita más voces como la suya.
¿Recuerdas el momento en el que decidiste que querías estudiar Ingeniería Informática? ¿Qué fue lo que despertó en ti esa chispa por la tecnología?
Como olvidar esa primera chispa, desde que tengo memoria mi asignatura favorita ha sido matemáticas y he estado obsesionada con saber todo de ordenadores. Sin embargo, no me planteaba la opción de trabajar con ordenadores, hasta que un día mi padre me contó que era el Software libre. De esa conversación se me quedó que había gente que ayudaba a otras personas usando sus conocimientos en ordenadores, y mi verdadera vocación siempre ha sido ayudar a otros. En ese momento sentí ese primer chispazo, el cuál al investigar más y encontrar más formas en las que podría ayudar a la gente, ese chispazo solo hizo que crecer más y más. Me di cuenta que estudiando informática no solo podría saciar mi curiosidad hacia el mundillo, sino que también podría en paralelo ayudar a la gente.
Has sido premiada como la mejor alumna universitaria en los STEM Talent Girl Awards 2024. ¿Qué significa para ti este reconocimiento y cómo te ha impulsado en tu camino?
Para mi este reconocimiento le da valor a todas las actividades que he realizado fuera del temario universitario. Por desgracia aunque sea muy valioso todo lo que los estudiantes aprendemos fuera de la universidad, estas actividades y nuevos conocimientos no llevan asignados unos créditos que les den valor, a pesar de muchas veces valer más que asignaturas enteras. Además, agradezco profundamente a la organización ASTI y al programa STEM Talent Girl por darme visibilidad y así hacer que más gente conozca la asociación Código Activo a la que pertenezco.
Realizaste un proyecto de investigación en el que trabajas con RSA y Python. ¿Podrías contarnos qué es lo que más te apasiona de este trabajo y cómo combinas las matemáticas con la informática?
Siempre he estado enamorada de las matemáticas y de los ordenadores, así que cuando Adriana Suárez Corona, mi mentora de STEM Talent Girl en 2º de Bachillerato, me propuso usar las matemáticas y la programación en un trabajo de investigación, no pude estar más feliz. Lo que más me emocionó fue poder aprender aritmética modular, la cuál no se enseña en el instituto. También estudiar los distintos algoritmos matemáticos de optimización de ciertas operaciones, honestamente me costó mucho entenderlos, pero estaba tan emocionada con el proyecto que en ciertos meses le dediqué más tiempo a él que al curso académico. Pero sin duda, lo más bonito para mí fue cuándo cogí toda esa teoría matemática que había aprendido y la plasmé en modo de código.
El proceso de estudiar todos los algoritmos matemáticos fue bonito, pero verlos aplicados en un programa real que cifraba y descifraba mensajes, fue una experiencia maravillosa.
También investigas sobre inteligencia artificial para detectar autoría de textos en el GVIS de la Universidad de León. ¿Cómo llegaste a este campo y qué retos o descubrimientos te han sorprendido más?
Por mi amor en mezclar matemáticas y programación, me llamó la atención una asignatura que tuve en la carrera de Introducción a los sistemas inteligentes, dónde no solo nos hacían programar modelos de inteligencia artificial, sino que también nos enseñaban las matemáticas detrás de ellos. Decidí entonces hacer mi TFG con Víctor González Castro, que era profesor de esta asignatura. De esta forma comencé a investigar en GVIS sobre procesamiento de texto, al inicio fue difícil, porque nunca había trabajado con procesamiento de texto y había hecho inteligencia artificial únicamente en la asignatura que comentaba anteriormente, pero desde el grupo me dieron mucha ayuda. Honestamente yo consideraba que “no estaba cualificada” y que la investigación dónde yo estaba no iba a llegar a nada por mi falta de experiencia, pero finalmente gracias al buen ambiente y la ayuda que me dieron, me fue fácil aprender y hoy puedo decir que esta investigación está en la actas de JNIC’25 cómo “Comparative analysis of Natural Language Processing methods for Authorship Attribution of texts of different lengths”.
La informática abarca muchísimos ámbitos que a veces no se conocen desde fuera. ¿Cómo le contarías a una niña todo lo que se puede llegar a hacer en este mundo y qué es lo que más te gusta de este sector?
Es una pregunta muy difícil, porque ¿qué no se puede hacer con la informática? Hace unos años diría tener una huerta, pero he visto herramientas informáticas que te ayudan a tener sana tu huerta. Podría decir hacer crochet, ya que ninguna máquina puede hacer crochet y tienes que hacerlo a mano, pero conozco a una veterana que hizo una inteligencia artificial para ayudarla a recordar la zona del patrón en la que está.
Honestamente, hagan lo que hagan, estudien lo que estudien, la informática les va a acompañar para facilitarles el trabajo, y eso creo que es lo más guay de la informática.
Personalmente soy una persona muy curiosa y no me sirve con saber mucho de una cosa, pero en la informática muchas veces tocas otros campos, por ejemplo con mi investigación de atribución de autoría he tenido que aprender de filología forense, mientras que a otros compañeros he visto que para sus trabajos de fin de grado han tenido que aprender de economía, razas de perros, etc.
Tu experiencia en el programa Mentor Women ha sido clave en tu trayectoria. ¿Qué papel han jugado las mentoras y el apoyo femenino en tu desarrollo personal y profesional?
Me han ayudado a hacer las cosas aunque yo no crea en mí misma. Me gustaría decir que lo que he aprendido es a creer en mí, pero es mentira, a veces sigo teniendo miedo de que las cosas se me queden muy grande y me dan ganas de abandonarlas antes de empezarlas.
Haber conocido a todas las mujeres que he conocido en el programa me han enseñado que no hay que tener miedo en intentar hacer cosas, pero que a veces no podemos evitar tener ese miedo.
Mirando hacia atrás, ¿qué momentos o decisiones han marcado un antes y un después en tu camino hacia la ingeniería y la investigación? ¿Hubo algún punto de inflexión que te confirmara que ibas por el camino correcto?
El erasmus me ayudó mucho a conocerme y saber qué quería hacer, tuve la suerte de que en mi universidad de erasmus nos hacían prácticas y trabajos muy cercanos a lo que se hace en la vida laboral. Gracias a esto fui capaz de conocer mejor que me gustaba de verdad y que no me llamaba tanto la atención. Finalmente gracias a esa experiencia me decidí por investigar en inteligencia artificial y este año cuando pude ir a mi primer congreso sentí que estaba en el camino correcto.
¿Has tenido que enfrentarte a estereotipos de género en tu entorno académico o profesional? Si es así, ¿Cómo los has superado?
Por suerte en la universidad de León no he tenido que enfrentarme a ningún estereotipo por parte de los profesores, conozco muchos casos de otras universidades dónde las alumnas lo sufren, pero por suerte en mi universidad todos los profesores están muy concienciados en que las mujeres valemos lo mismo que los hombres. Por desgracia, estos estereotipos si que les sufrí durante la época del instituto cuando participaba en actividades informáticas fuera del instituto. Por suerte para mí soy muy cabezota, entonces cuanto más estereotipos de género sufrí, en vez de desanimarme, más tenía claro en llevarles la contraria y estudiar informática. Por desgracia, esto no es lo normal, y sufrir estos estereotipos antes de elegir tu carrera universitaria, pueden hacer que muchas mujeres eviten escoger informática pensando que será así la vida laboral, cuándo este no es el caso. Mi consejo es evitar a esa gente, son una minoría, por desgracia una minoría que hace mucho daño, si te están tratando con prejuicios lo mejor es ignorar y centrarte en la gente que sí te trata como mereces, y si ves que a alguien le están tratando con prejuicios, recordarle a esa persona que vale lo mismo que los demás.
Desde tu experiencia, ¿cómo crees que la tecnología puede transformar el mundo en positivo, especialmente para las mujeres?
Actualmente con los ordenadores cuánticos, la inteligencia artificial, nos encontramos en una transformación digital y tecnológica enorme. En esta transformación pueden ocurrir dos cosas, en la primera se pone al mismo nivel al hombre y la mujer y lideran juntos esta transición consiguiendo mejorar la vida de todos. La segunda posibilidad es que se deje fuera a las mujeres, perdiéndose muchos puntos de vista distintos, además de que las mujeres somos el 50% de la población, y dentro de unos años no creo que nos podamos permitir un porcentaje de la población tan alto que no trabaje en esta revolución digital.
Por desgracia si no hacemos nada nos estamos acercando a la segunda posibilidad, no somos suficientes mujeres en informática, y en matemáticas en vez de mejorar los números cada vez hay menos mujeres. He oído muchas excusas usando la biología para intentar explicar porque no hay suficientes mujeres tecnológicas, pero no hay argumento biológico que explique la caída del porcentaje de mujeres trabajando en matemáticas e informática al popularizarse estos trabajos. Siendo la realidad que cuando había una mayoría de mujeres, estas profesiones fueron subestimadas, y después al cobrar importancia se empezaron a considerar “profesiones de hombre” dejando a las mujeres fuera. Si no logramos que estas profesiones se vuelvan mixtas y no recordamos a las mujeres que lideraron en su momento la primera generación de ordenadores, desgraciadamente la tecnología no transformará tanto ni nos mejorará tanto la vida.
¿Qué le dirías a una niña que siente curiosidad por la tecnología pero no se atreve a dar el paso? ¿Cómo la animarías a explorar este camino?
No dejes que otros vivan tus sueños por ti. Muchas veces cometemos errores, intentamos cosas y no nos salen. Pero si no intentamos nada entonces es como haber fracasado en todo. La tecnología es un campo enorme, y también puedes encontrar algunas cosas que no te gusten y otras que te apasionen dentro de ella. Atrévete a explorar todas las opciones que puedas, busca cursos y actividades en tu ciudad, siempre hay alguna extraescolar o organización que enseña tecnología e informática. Pero si no encuentras ninguna, no pasa nada. Hay miles de personas que han dejado miles de recursos en internet para aprender gratuitamente. Yo empecé sola en Scratch (programación en bloques) y luego con un grupo de amigos nos pusimos a aprender appinventor (crear aplicaciones móviles con programación en bloques), tinkercad (diseño 3D), python (lenguaje de programación) y arduino(robótica). Te animo a hacer lo mismo que yo.