Innovadoras TIC charla con Ana Freire, PhD in Computer Science y fundadora de Wisibilízalas


 

Hola Ana, para empezar, estaría genial que nos contaras un poco sobre ti, ¿qué iniciativas estás desarrollando en la Universidad Pompeu Fabra? ¿Cómo surgieron las ideas y cómo decidiste involucrarte en estas investigaciones?

Soy gallega, de un pequeño pueblo llamado Rábade, donde nací hace ya 36 años. Siento una gran pasión por mi tierra, pero me encanta viajar a países con culturas muy distintas, algo que se ha convertido en mi mayor hobby. Un reto personal es llegar a visitar más países que años tengo (¡estoy a punto de conseguirlo!).

Siempre me gustó la tecnología, y por ello estudié Ingeniería Informática y posteriormente el Doctorado en Tecnologías de la Información y las Comunicaciones. He vivido en Reino Unido, Italia yahora mismo en Barcelona, donde soy profesora en la escuela deingeniería e investigadora en el departamento de tecnología de laUniversitat Pompeu Fabra. Me gusta aplicar la tecnología a problemas sociales, porque además creo que ésta es la ciencia que tienesentido. Por ello, colaboro con médicos y psicólogos en diversos proyectos que aplican la tecnología en el campo de la salud.

 

Por otro lado, eres fundadora de Wisibilízalas, un concurso que lucha contra los estereotipos que asocian el trabajo en tecnología con el género masculino. Cuéntanos sobre ello. ¿Cómo decidiste lanzarte?

Todo empezó en 2012, cuando fui finalista de la Google Anita Borg Scholarship, y me invitaron a ir a la sede de Google en Zurich. Allí entré en contacto con muchas mujeres, estudiantes de tecnología, con grandes inquietudes. Desde ese momento, Google nos ofreció apoyo para organizar eventos con el objetivo de promocionar la tecnología entre el público femenino. Cuando todavía estudiaba en la Universidade da Coruña, organizamos un concurso dirigido a colegios de secundaria de Galicia y ya posteriormente, cuando entré en la Universitat Pompeu Fabra, quise hacer algo más grande y lancé Wisibilízalas.

Tres años más tarde, se ha convertido en un concurso internacional, en el que han participado más de 1000 estudiantes de España y Latinoamérica, y que han conocido a más de 400 mujeres referentes en tecnología. A día de hoy puedo decir que es el proyecto que más satisfacción me da. Su objetivo principal es generar referentes femeninos en estudiantes (chicas y chicos) de primaria y secundaria. Pero, además, estos referentes deben ser mujeres actuales y cercanas trabajando en tecnología, de las que tienen que crear una página web, entrevistarse con ellas… en resumen, acercarse a ellas para que les puedan servir de inspiración.

 

 

¿En qué punto del proyecto y de las investigaciones estás ahora? ¿Cuáles son tus próximos objetivos? ¿Estás desarrollando algo nuevo?

El proyecto al que más tiempo le dedico se llama STOP (Suicide Prevention in sOcial Platforms) tiene como objetivo detectar enfermedades mentales en redes sociales. Para ello trabajamos con psicólogos que son los que nos dan pistas de cómo estas enfermedades se pueden manifestar en las redes. Aplicamos técnicas de inteligencia artificial y procesado del lenguaje natural para detectar patrones de comportamiento. También trabajo con hospitales, realizando análisis de datos para entender más ciertas enfermedades neurológicas, como puede ser la esclerosis múltiple.

Me gustaría seguir moviéndome en esta línea, con aplicación en salud, pues ¿qué mejor aplicación de la tecnología que aquella que mejora el bienestar de las personas?

 

Además de ser investigadora y fundadora de Wisibilízalas, eres docente en el Departamento de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones y directora del Centro sobre Sostenibilidadde la UPF. Has sido galardonada con el Premio Ada Byron Joven 2019, con el Artificial Intelligence Women Challenge 2018, el Premi Equit@T 2017 y muchos más… ¿Cómo compaginas todo esto? ¿Cuáles crees que han sido las claves de tu éxito?

La clave ha estado en no limitarme a hacer solo una cosa. Por ejemplo, en varias ocasiones me aconsejaron no ser tan multidisciplinar, y centrarme en un solo tema, para ser muy buena en eso y llegar al éxito. Sin embargo, creo que el éxito se alcanza cuando te enriqueces como persona, no cuando llegas a ser la mejor en algo. Y ese enriquecimiento lo he conseguido al dedicarme a proyectos muy distintos, incluso de campos alejados del mío, obligándome a aprender cosas nuevas continuamente, y a conocer gente muy distinta e inspiradora.Para compaginar todo se necesitan muchas horas de dedicación, pero el truco está en que la mayor parte de lo que hagas, no lo definas como trabajo, sino como lo que te gusta hacer.

 

 

“El éxito no está en vencer siempre, sino en no desanimarse nunca” (N.B). Emprender e innovar no siempre es evidente… ¿Alguna vez has pensado en tirar la toalla? ¿Qué ha sido lo más difícil?

Tirar la toalla, nunca. Pero cambiar de trabajo, sí. El sector tecnológico puede ser estresante y competitivo, pero tiene algo muy bueno y es el gran abanico de oportunidades laborales. No hay que tener miedo a cambiar de actividad si la que hacemos no es lo que buscábamos. Lo más difícil es saber llevar la poca estabilidad que nos ofrecen a
profesores e investigadores en el ámbito universitario. Personas con una formación altísima, no solo en sus disciplinas, sino en idiomas, comunicación…, no consiguen un trabajo estable hasta después de muchos años contribuyendo a dar prestigio a sus Universidades. Más que premiados nos sentimos evaluados constantemente.

 

¿Cómo ha sido tu experiencia como mujer en este sector? ¿Has notado alguna diferencia entre géneros?

Aunque he trabajado en algunos grupos con balance de género, todos mis jefes han sido siempre hombres. De hecho, en algunos eventos en los que presentábamos productos software, pensaban que yo era la azafata en lugar de ser la ingeniera, y me preguntaban: “Where is the technical guy?” [“¿Dónde está el experto?”], a lo que yo respondía: “The technical guy is me” [“El experto, soy yo”]. Me pedían disculpas y algunos incluso se sonrojaban.

 

Desde tu experiencia, ¿cómo las TIC pueden ayudar a empoderar a las mujeres y fomentar su emprendimiento en el mundo?

Quizá le daría la vuelta a la pregunta, y diría ¿cómo las mujeres pueden empoderar a las TIC? Actualmente hay poca representación femenina en tecnología, y sabemos que los beneficios de un balance de género serían extraordinarios, no sólo a nivel económico para las empresas (está demostrado que un balance de género aumenta sus beneficios), sino para la calidad de los productos tecnológicos y la disminución del sesgo que pueden presentar.

 

En tu opinión ¿por qué es necesario que las mujeres tengan mayor visibilidad, como referentes, en los sectores STEAM y del emprendimiento?

Los referentes han sido inspiración siempre para mucha gente en campos muy distintos: la música, la política, la sociedad… En STEM hay referentes, pero casi todos son masculinos. Es difícil encontrar a alguien que sepa nombrar a una mujer referente en tecnología.

¿Problema? La falta de referentes femeninos es una de las causas más importantes por las que las niñas no se animan a cursar carreras STEM. Si esto sigue así, estaremos excluyendo a gran parte de la población de los procesos de desarrollo científico-tecnológicos, y de tantas ofertas laborales que generan estos sectores.

 

Al hilo de lo mencionado, ¿quién ha sido tu referente?

Pues en mi caso, he de decir que no estudié una carrera técnica por seguir un referente en concreto, quizá porque en ese momento, lamentablemente, los referentes femeninos en tecnología apenas se daban a conocer. En mi caso fue gracias a que mi familia me mantuvo muy en contacto con el mundo científico-tecnológico, en parte por el negocio familiar, del campo de la automoción, y en parte porque parte de mis juegos eran siempre tecnológicos: microscopios, juegos de exploración, un ordenador… Esto demuestra lo importante que es la familia para abrir puertas y así enriquecer el futuro de las niñas (y también de los niños).

 

Innovadoras TIC es un programa que quiere visibilizar y promocionar proyectos como el tuyo, liderados por mujeres. ¿Cómo animarías a las niñas y mujeres a que persigan sus sueños más allá de los estereotipos? ¿Algún consejo?

Me gustaría decirles que están en el momento de hacer lo que quieran. Que exploren, sin limitación alguna, para poder saber todas sus opciones y decidir libremente. Pueden hacer todo lo que se propongan. Estos estereotipos de género en tecnología no existen en otros países como India, donde la mayor parte de las estudiantes de tecnología son mujeres. Y, en parte, lo son por el apoyo familiar recibido a la hora de elegir carrera (sus familias ven las carreras tecnológicas como una gran oportunidad laboral, no solo para hombres). Por ello, es también necesario animar a los padres y madres a que, desde que sus hijas son pequeñas, les abran las puertas a la tecnología, mediante juegos tecnológicos, cursos… que les enseñen las opciones que ellas también pueden elegir. Les espera un futuro prometedor.

He visto varias publicaciones que aseguran que en 2020 no se cubrirán cientos de miles de puestos de trabajo tecnológicos en Europa por falta de personal cualificado. La sociedad necesita estos perfiles para aplicar en diferentes ámbitos (biomedicina, finanzas, energía, política…), lo que dota a las carreras técnicas de un gran
atractivo y las convierte en una apuesta segura.