Laura M. Lechuga Gómez es investigadora, química, profesora de Investigación CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España), y jefa del Grupo de Nanobiosensores y Aplicaciones Bioanalíticas en el Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología (ICN2) en Barcelona. Ha publicado más de 300 trabajos de investigación, posee 8 familias de Patentes y cuatro secretos industriales, ha impartido más de 470 Conferencias invitadas en todo el mundo y ha sido co-fundadora de dos empresas Spin-offs, siendo pionera en España en hacerlo. Laura, ha recibido numerosos premios como el Premio Nacional de Investigación “Juan de la Cierva” en 2020, XVIII Premio de Investigación Burdinola en 2021, la Medalla de la Fundación Internacional Olof Palme en 2021 o el Doctorado “Honoris Causa” por la Universidad de Cádiz en 2021, entre otros. Además, de abril 2020 a septiembre del 2021 ha formado parte del Grupo de Trabajo Multidisciplinar, panel de expertos científicos que ha asesorado al Ministerio de Ciencia e Innovación y al Gobierno de España en temas relacionados con la pandemia.

Hola Laura, eres química de formación y tu trayectoria es impresionante ¿Qué te impulsó a enfocar tu carrera en Nanociencia y Nanotecnología?

Cuando realizaba mi Tesis doctoral en el Centro Nacional de Microelectrónica (CNM-CSIC) en Madrid, empecé a trabajar en Nanotecnología como una forma de conseguir unos microsensores de gases sumamente competitivos, aunque en aquella época aún no se denominaba nanociencia y nanotecnología como tal. Desde entonces, me he focalizado en este campo porque la Nanotecnología es la única que nos permite diseñar y fabricar dispositivos de análisis que superan las prestaciones actualmente existentes y que, además, sean fácilmente miniaturizables y de bajo coste.

¿Qué proyectos estás llevando a cabo actualmente desde el Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología (ICN2)?

Actualmente trabajamos en tres líneas en paralelo: 

  1. En ingeniería y tecnología nanofotónica, intentando miniaturizar nuestros microchips ópticos e incorporarlos a modelos portátiles de análisis para que nuestros avanzados nanobiosensores puedan emplearse en el futuro en cualquier entorno y no solo en nuestros laboratorios. 
  2. Diagnóstico precoz de cáncer: queremos proporcionar unos dispositivos que, con muy poca cantidad de muestra del paciente, nos permitan lograr un diagnóstico preciso y al mismo tiempo muy precoz de la aparición del cáncer siguiendo las pistas epigenéticas y proteicas que nos dejan las primeras células cancerosas.
  3. Diagnóstico precoz de infecciones: uno de los grandes desafíos de nuestro siglo es el constante aumento de todo tipo de infecciones, agravado por el problema de las superbacterias, que son resistentes a la mayoría de los antibióticos. Uno de los principales obstáculos actualmente es conseguir un diagnóstico de estas infecciones a tiempo. Queremos proporcionar sistemas de medida portátiles y más competitivos que acorten considerablemente el tiempo de análisis, para que así, en los hospitales, puedan proporcionar el tratamiento más adecuado antes de que la infección avance y termine con la vida del paciente.

Uno de ellos, Enlight, ha sido recientemente premiado por la Lung Ambition Alliance. Un nanodispositivo óptico que detecta el cáncer de pulmón desde etapas muy tempranas. Cuéntanos más sobre este proyecto y sus aplicaciones. 

El Proyecto Enlight propone una novedosa herramienta de diagnóstico para detectar el cáncer de pulmón incluso en etapas muy tempranas. Se trata de un nanodispositivo óptico capaz de detectar simultáneamente marcadores proteicos y epigenéticos relacionados con la aparición y progresión del cáncer, usando para ello, tan solo, unas gotas de sangre del paciente. Disponer de un diagnóstico precoz podría permitir una medicina más personalizada, así como la aplicación de terapias más eficientes, incrementando la tasa de recuperación y supervivencia del paciente de la que es actualmente la primera causa global de muerte por cáncer, el cáncer de pulmón.

¿Qué aplicaciones tienen los nanobiosensores y qué pueden aportar en la práctica? ¿Cómo la nanotecnología puede revolucionar la innovación en medicina con un impacto real a corto plazo?

El campo de las aplicaciones de los nanobiosensores es casi infinito, abarcando desde el diagnóstico clínico, medioambiental, control alimentario, al control de plagas e incluso a la búsqueda de vida extraterrestre. Utilizando Nanotecnología para fabricar estos biosensores nos permite ofrecer una tecnología muy competitiva, con un alto nivel de sensibilidad, fiabilidad y con un tiempo de respuesta muy corto y además empleando tan solo unas gotas de un fluido humano (como puede ser sangre u orina) para el análisis.

La tecnología de nanobiosensores puede suponer un gran paso para descentralizar el diagnóstico clínico y hacerlo más accesible a todas las personas y a todos los países, tal como hemos comprobado con el caso del test de antígenos para la COVID, que cualquiera ha podido hacerlo en cualquier momento y en cualquier lugar del mundo. Podremos ver un impacto real cuando dispongamos de estos dispositivos para diagnosticar todo tipo de enfermedades, especialmente al inicio de estas, y además con estos mismos dispositivos podremos comprobar cuál es la evolución de los pacientes a los tratamientos.  

En plena pandemia desarrollaste el biosensor CONVAT para detectar covid-19 con la saliva, ¿cómo fue este proceso?

Mi grupo de investigación ya era experto en el desarrollo de biosensores ópticos muy competitivos para diversas aplicaciones en el ámbito del diagnóstico clínico, por lo que pensamos que se podría aplicar igualmente a la detección de la COVID-19. Además, contábamos con una relación previa con un gran experto en coronavirus de la Universidad de Barcelona, lo que nos permitió configurar rápidamente un consorcio Europeo de alto nivel y así conseguir la financiación exprés que lanzó la Unión Europea a principios de la pandemia. Con esa financiación y durante la pandemia, hemos desarrollado dos biosensores simultáneamente, uno para la detección directa del virus SARS-COV-2 y otro para la determinación serológica de cada paciente infectado. 

Como reconocida investigadora ¿cuáles crees que son los principales estereotipos a los que se enfrentan las mujeres en el mundo de la ciencia, la tecnología y el emprendimiento para conseguir romper la brecha de género?

Desde pequeñas se fomenta y se inculca en las mujeres la imagen de que las grandes ideas y los grandes avances los hacen los hombres: lo vemos constantemente en las películas, en las noticias, en las redes sociales, en los libros…la mujer en la mayoría de los casos siempre ocupa un segundo plano. Tanto nuestro entorno social, educativo y familiar e incluso nosotras mismas, nos ponemos trabas en el camino de la ciencia, la tecnología y el emprendimiento porque no nos han generado la suficiente confianza en nosotras mismas y en nuestras capacidades. 

En mi libro “Una científica saltando vallas” (Plataforma Editorial) describo muchos de los obstáculos que he encontrado a lo largo de mi carrera precisamente por no querer asumir estos estereotipos. Pero al mismo tiempo, los obstáculos y desafíos me hicieron reaccionar y ser más consciente del valor de la mujer científica y de nuestros derechos. Debemos aprender que solo nosotras, mujeres y científicas, podemos cambiar el rumbo de los cánones establecidos por una sociedad patriarcal.

Ha publicado más de 300 trabajos de investigación, ha impartido más de 470 Conferencias invitadas en todo el mundo y ha sido co-fundadora de dos empresas.

Nos gustaría que nombres a alguna referente femenina que has tenido a lo largo de tu vida, ¿quiénes han sido y por qué?

Pues la verdad es que no he tenido ninguna, porque cuando estudiaba tanto en el colegio como en la universidad, prácticamente no se hacía referencia a ninguna científica ni a ninguna profesional en los libros de texto ni en las clases. Tampoco se hablaba de ninguna mujer profesional de renombre ni en la radio, TV o prensa, por lo que era muy difícil tener ninguna referente en la que mirarte, más allá de algunas escritoras famosas.

Para terminar, ¿qué consejo le darías a esas niñas y mujeres que están leyendo esta entrevista y quieren dedicarse a carreras STEAM?

Cree en ti misma y estudia carreras STEM, porque eres igualmente capaz de alcanzar todos los niveles y todos los puestos que te puedas imaginar. Solo es cuestión de perseverancia, convicción y trabajo duro. Sé tú una de las científicas, ingenieras, matemáticas e investigadoras del futuro que tanto vamos a necesitar. ¡A por ello!