Eider Etxebarria y Beatriz Santamaría son creadoras de Bizipoz, una cooperativa que fomenta el empoderamiento de las personas mayores a través del diseño y desarrollo de programas para “envejecer con alegría”. Licenciadas en Liderazgo para el Emprendimiento Innovador (LEINN) y especialistas en envejecimiento activo, han ganado el Premio Forbes 30 under 30 España en 2018 y en 2017 recibieron el Premio Jóvenes Emprendedores Sociales de la Universidad Europea e Invisible Beauty Makers de la Fundación Puig y Ashoka España.
Beatriz, Eider, sois las impulsoras de Bizipoz, una cooperativa que desarrolla programas para fomentar el envejecimiento activo. ¿Cómo surge esta idea?
Nace en el año 2015. Decidimos unir nuestras inquietudes y esfuerzos para dar forma a una idea que fue madurando en nuestras mentes. Nuestro objetivo era conseguir que las personas vivieran una vida plena en su madurez promoviendo el envejecimiento activo, para que estas pudieran devolver a la sociedad el aprendizaje acumulado a lo largo de su vida. Los primeros programas pilotos en 2016 nos permitieron testar una metodología de trabajo propia e identificar las necesidades reales que surgen alrededor de las personas mayores. Fue en 2017 cuando decidimos lanzar nuestro proyecto al mercado. Constituimos una cooperativa pequeña sin ánimo de lucro, de iniciativa social.
En Bizipoz contáis con programas de transición a la jubilación para que empresas y trabajadores afronten este ciclo de manera positiva, ¿en qué consisten estos programas y qué impacto están teniendo?
En Bizipoz queremos que las personas que están próximas a la jubilación vivan este nuevo ciclo vital de sus vidas con un enfoque positivo, saludable y consciente.
Los programas de transición a la jubilación sirven para ayudar a las empresas y a las personas empleadas a afrontar su transición a la jubilación de forma positiva, minimizando los riesgos inherentes que puede suponer este proceso en sus vidas.
Ofrecemos a las personas las herramientas necesarias para reflexionar sobre esta nueva etapa. Combinamos talleres prácticos y vivenciales con coaching grupal: realizamos sesiones de mentoring para abordar los temas que les preocupan. Promovemos su capacitación digital. Ayudamos a protocolizar un correcto traspaso del conocimiento. Trabajamos la salud física, financiera y emocional.
En el ámbito empresarial es tan importante formar al que entra como al que se va. En un plazo de cinco-diez años será rara la empresa que no prepare psicológicamente a sus trabajadores y trabajadoras para la jubilación, para el cambio a esta nueva etapa de la vida en la que todavía hay mucho para aportar y participar.
En un mundo en el que prima el talento joven, vosotras os habéis propuesto el objetivo de poner en valor el talento y la experiencia de las personas mayores. Desde vuestra experiencia, ¿creéis que se le da la importancia necesaria al envejecimiento activo a nivel institucional?
Hay muchos más recursos y servicios en materia de dependencia que de prevención. Estos dos últimos años han sido complicadísimos. Las personas mayores han sido un colectivo muy castigado por las consecuencias de la pandemia; todavía hay miedo a relacionarse con gente, a salir… Estas situaciones invitan a las instituciones a promover iniciativas, pero no son suficientes. Ahora con más razón hay que actuar. Queda mucho por hacer.
En 2021, el Instituto de las Mujeres recoge en el estudio “El emprendimiento digital femenino en España” que solo el 16% de startups están creadas por mujeres, ¿cómo ha sido para vosotras el reto de emprender?
Ha sido toda una aventura. Hemos tenido mucha suerte y más que nada, hemos sabido preguntar a las personas y entidades correctas a su debido tiempo. Existen ayudas para desarrollar ideas, crear un plan de negocio con ayuda profesional, capital semilla, espacios de incubación y aceleración… Lo más importante es saber qué es lo que necesita tu proyecto en ese momento y buscar las ayudas y recursos existentes. Ya que no todo vale para todo el mundo, depende mucho de en qué momento se encuentra el proyecto.
Vuestro emprendimiento responde a la realidad actual, donde la esperanza de vida aumenta y las personas quieren vivir bien y ser parte activa de la sociedad. ¿Cómo creéis que las competencias digitales ayudan a este proceso de una forma más inclusiva?
Muchas de las personas mayores no son nativas digitales, y es importante que se formen en estas competencias para que sean autónomas y puedan realizar sus gestiones sin depender de nadie, ni de la propia tecnología. Para ello, se debe capacitar y formar con formaciones prácticas, presenciales y recurrentes, ya que el avance es muy rápido. De esta manera, las personas pueden resolver sus dudas y animarse a utilizar las nuevas tecnologías, en vez de sentirse aisladas por no usar la tecnología.
Con Bizipoz ganasteis el Premio Forbes 30 under 30 España, además de otros reconocimientos como el Premio Jóvenes Emprendedores Sociales de la Universidad Europea o Invisible Beauty Makers. ¿Qué han supuesto para vosotras estos reconocimientos?
Los reconocimientos siempre están muy bien. Los comienzos suelen ser difíciles y estos premios han sido un reconocimiento muy importante para nosotras. Sobre todo, para saber que estábamos haciendo un buen trabajo. Además, a los clientes también les hacía ilusión que recibiéramos dichos premios, ya que era un reconocimiento compartido.
Formáis parte de la iniciativa Ciudades Amigables con las Personas Mayores, promovida por la OMS y el IMSERSO. ¿Qué es y cómo ha sido la puesta en marcha en vuestra comunidad? ¿Cómo conecta esta iniciativa tanto con los municipios como con las personas mayores?
El proyecto de Ciudades Amigables es un proyecto promovido desde la OMS. En 2012 ya comenzaron a divulgar la importancia que tienen los municipios y las ciudades para el envejecimiento de la población. Por ello, nosotras impulsamos, desarrollamos y dinamizamos estos proyectos en los municipios. El proyecto ya tiene una metodología estructurada. La clave está en crear un buen grupo multidisciplinar compuesto por personal técnico, político, agentes sociales y personas de todas las edades, para reflexionar y analizar diferentes apartados del municipio. Después, se elabora un plan de acción con las propuestas planteadas y se ejecutan las mismas a través del contacto de la ciudadanía con las instituciones.
En InnovadorasTIC damos visibilidad a mujeres que podéis ser referentes para otras chicas. Pero para vosotras, ¿qué mujer o mujeres tuvieron ese papel en vuestras vidas?
En nuestro caso, ambas hemos crecido en un ambiente emprendedor y empresarial. Podría decirse que en parte lo llevábamos en nuestro ADN. También es cierto que nuestras madres y abuelas siempre nos han apoyado en nuestro proyecto. Además, a lo largo de nuestra trayectoria nos hemos unido y colaborado con otras mujeres emprendedoras con proyectos muy interesantes, por lo que siempre hemos sumado fuerzas juntas.
Contadnos una experiencia o un momento que se os venga a la mente que os hiciera daros cuenta de que os queríais dedicar a esto.
En los proyectos pilotos realizados en 2016, nos dimos cuenta de que ayudamos a muchas personas. Vimos que tanto los clientes (ayuntamientos) como las personas usuarias (personas mayores), estaban muy contentas y satisfechas con los programas que habíamos realizado. Nos dimos cuenta de que con nuestro proyecto podíamos impactar de forma positiva en la vida de muchas personas. Fue entonces cuando decidimos seguir con el proyecto.
Para terminar, os pedimos un consejo para las niñas y mujeres que están leyendo esta entrevista y quieren dedicarse a carreras STEAM o emprender en el sector tecnológico o científico.
Lo que más destacamos es la importancia de investigar en el área que te gusta, que sean curiosas y que encuentren apoyo para comenzar a desarrollar su idea de proyecto o investigación. Además, hay que buscar referentes para poder inspirarte y motivarte, sobre todo en los momentos malos. Lo curioso no es que falten referentes, es que falta visibilizarlas poniendo en valor el trabajo que realizan.