Mariad Lucas Torres y Ángela Álvarez, ingeniera informática y psicóloga, respectivamente, y expertas en análisis de datos, son cofundadoras de MyDataMood, una plataforma que ofrece opciones a los usuarios para que puedan elegir cómo gestionar sus datos en Internet. Quieren empoderar al usuario para que puedan decidir sobre su identidad digital y qué hacer con ella, si la quiere compartir con determinadas empresas y obtener un beneficio por ello.

Hablemos sobre el proyecto que habéis co-creado, ¿qué es y cómo surge la idea de desarrollar MyDataMood?

Todos los fundadores veníamos de trabajar en el mundo del dato y la tecnología y además con bastante conocimiento del RGPD, y habíamos visto que, por un lado, los datos se acumulan, se acaparan e incluso se roban, pero ni siquiera se utilizan bien, ni para darle valor al usuario ni usándolos de forma respetuosa. Así que decidimos poner nuestro granito de arena para mejorar esta cadena, sin ingenuidad, sabiendo que solo aportando valor a empresas y usuarios se cambian las cosas.

MyDataMood es una plataforma donde los usuarios gestionan su identidad digital. Queremos empoderar al usuario con respecto al uso de su data. En ella el usuario puede conectar información suya y así podrá visualizar la identidad digital que proyecta. Y a partir de ahí decidir qué hacer con ella, si la quiere compartir con empresas, con cuales sí y con cuales no, y por ello, lógicamente obtener un beneficio. Los usuarios tienen que entrar en la cadena de valor del dato y beneficiarse de ello. Porque los datos son de los usuarios, no de las empresas. No es lógico que las empresas vendan nuestra información sin nosotros ser muy conscientes de ello, y encima sin beneficiarnos de ello. Somos una plataforma real de ZERO PARTY DATA.

En una era en la que la información está prácticamente al alcance de todos, ¿qué valor tiene nuestra identidad digital?, ¿Y quién se aprovecha de ella?

Nuestra identidad digital tiene mucho valor. Las empresas la necesitan para conocernos mejor y ofrecernos servicios y productos más personalizados. Por tanto, hay muchas empresas que pagan grandes cantidades por obtener tus datos de contactos o incluso saber el momento de intención de compra. Vamos a un mundo cada vez más personalizado, y como tal, la identidad digital cada vez va a tener más valor.

Vuestro propósito es promover un contrato social más justo y transparente entre los usuarios y las empresas. ¿Cómo se puede recuperar la soberanía ciudadana sobre los datos?

De forma colectiva. El ciudadano por sí solo es difícil que consiga algo, pero todos juntos si podemos conseguir que el mercado se adapte a nuestras necesidades y exigencias.

¿Qué recursos y herramientas ofrece MyDataMood para poder ejercer nuestros derechos ciudadanos de forma sencilla y gratuita? ¿Qué beneficios supone para las personas usuarias?

Desde MyDataMood el usuario puede ejercer 3 derechos que proporciona GDPR, El de acceso, el de oposición y el de supresión. Actualmente estamos trabajando en el de portabilidad. MyDataMood actúa como representante legal para los usuarios. Y nosotros nos encargamos de solicitar la información a las empresas en nombre de los usuarios.

Vivimos en una época de transición digital vertiginosa en la que no todas las personas están incluidas. Desde vuestro punto de vista, ¿cómo se podría luchar por un Internet más inclusivo, abierto y descentralizado? ¿Cómo poner a las personas en el centro de esta transformación?

Hay generaciones que han quedado desde el principio fuera de la digitalización, obsoletas de partida, de lo que no nos damos cuenta es de que todos nos vamos a ir quedando obsoletos porque la digitalización avanza a un ritmo exponencial imposible de seguir. Tarde o temprano todos nos vamos a sentir perdidos. Por tanto, esto no es una cuestión de cómo lo resolvemos ahora, sino en general, cuál es la estrategia de diseño de mundos digitales para que nadie se quede atrás. Si las generaciones que están diseñando el ahora fueran conscientes de que también se van a quedar obsoletas, a lo mejor empatizarían más con las generaciones que están dejando fuera.

Dicho esto, igual que tenemos versión móvil, versión PC, versión… debemos tener versiones adaptadas a personas con limitaciones cognitivas o perceptuales, ya sea por edad o por otras condiciones. Y para que esas versiones sean buenas hay que hablar con ellos, preguntarles, observarles, entender sus necesidades, no hacerlo todo desde qué me imagino yo que necesitan los demás. Esto se conoce como “accesibilidad cognitiva” y ya hay gente trabajando en ello.

En resumen, si somos capaces de personalizar una web para vender más, ¿no vamos a ser capaces de personalizar la experiencia de usuario para que sea accesible a diferentes perfiles?

Hablando de privacidad y datos, ¿qué supondrá en el futuro el Metaverso para los usuarios?

SI la vida se digitaliza totalmente, y el metaverso va a ser un punto de inflexión para ello, el control de nuestra identidad digital será crítico porque nuestra identidad digital tendrá un peso mucho mayor en nuestra IDENTIDAD. Seremos nuestros datos.

El metaverso es la primera oportunidad real que tienen los usuarios de gestionar su privacidad y aportar sus propios datos a las experiencias que ofrezcan los metaversos.
El concepto de descentralización genera una diferencia que permite que la gestión de los datos personales quede en manos del wallet del usuario.

El reto ético y económico de los metaversos será elegir entre compartir con sus usuarios la información comportamental permitiendo por fin la personalización absoluta con nuevos modelos de negocio o, por el contrario, pretender una explotación opaca emulando los males de la programática.

Ángela, comenzaste estudiando Psicología, ¿en qué momento decides cambiar hacia el mundo de la tecnología y dedicarte a él?

Estudié psicología, pero desde el principio lo mío fue el análisis del comportamiento humano y tiré por el análisis basado en datos… Y actualmente no hay análisis de datos que no esté soportado en la tecnología, así que cada vez he ido explorando más las oportunidades que da la tecnología tanto para recoger información como para poder analizarla.

Maria, en tu caso, recibiste el primer premio Google Chrome Web Store, ¿qué supuso para ti?

La verdad es que fue un premiazo. Nos regalaron 1 viaje de una semana a San Francisco a las oficinas de Google y al evento anual Google I/O. Fue ver otra realidad en cuanto a desarrollos, startups. Y ahí fue cuando finalmente me lancé al mundo del emprendimiento. 6 meses más tarde monté mi primera empresa, una consultora tecnológica.

Habladnos de las referentes femeninas que habéis tenido, mujeres a las que admiráis y que ayudaron a pavimentar vuestras inquietudes y carrera profesional.

(Mariad) Mi abuela. Era una mujer con mucha fuerza, energía y super emprendedora para su época. Ella no lo supo, y quizás yo tampoco hasta hace no tanto que reflexionaba sobre ello. Su manera de ser me marcó desde pequeña y dicho empoderamiento yo lo veía como algo innato incluso lógico, pero con el paso del tiempo me he dado cuenta de que no, que falta aún mucho para que las mujeres sientan de manera innata ese poder.
(Angela) En mi caso mi hermana, me saca 10 años, feminista desde siempre que me llevó a mi primera manifestación del 8m cuando yo tenía 12 (hace 33 años!!) y me enseñó que por ser mujer no tenía que limitarme a nada. Es mi referente personal y profesional, de tesón y pasión por el conocimiento, ella investiga sobre los derechos de los ciudadanos (es catedrática de derecho civil) y yo sobre el comportamiento humano y el uso de los datos.

¿Algún consejo para las niñas y mujeres que están leyendo esta entrevista y quieren dedicarse a carreras STEM o emprender en el sector tecnológico o científico?

(Mariad) Que es apasionante. Que no lo duden. Si en algún momento alguien les dice que eso es de chicos que no tiren la toalla. Tenemos mucho que aportar las mujeres en las carreras STEM.

(Angela) Que reflexionen sobre lo que las motiva, que no piensen en “carreras” o “trabajos”, sino en lo que mueve su curiosidad y las pone en marcha. Que son capaces de todo y que elijan libremente, porque si es tu pasión serás buena en lo que hagas.